Lugar:
Como siempre, hay que tener ojo con los números: el Cultural Buen Ayre tiene suficiente espacio para un evento de mediano porte, pero qué pasará con los eventos grandes que se vienen y que traen artistas internacionales invitados (ver cuadrito de eventos debajo de todo)? Sólo resta esperar y ver qué sucede para sacar conclusiones. Un detalle que notamos es que la disposición de los stands hizo complicada la circulación, incluso sin que el lugar estuviera abarrotado de gente. Si bien, en la parte central del piso de abajo, había pequeños pasillos para facilitar el paso de las personas, había mucho espacio en la parte trasera (cerca de donde estaba la cocina que nos mataba con su olorcito a hamburguejas al vapor). Así como se proliferan los eventos, lo propio hacen los stands. Cada vez hay más y más, y el desafío para encontrarles un buen lugar crece a esa misma velocidad. Un punto a favor y, en este caso particular, uno de los más destacados del evento fue el aprovechamiento de los salones del piso superior (al que se accedía por una pequeña escalera) para el sector gamer. Sin duda, podemos decir que es una de las primeras veces en que los fans de los juegos tienen en un evento casi una casa para dar rienda suelta al vicio: 3 PS2, Play 3, X-BOX 360, salón de Wii y salón de Guitar Hero. Una propuesta interesante para pasar el día o simplemente pegarse un poco con algún amigo en un “free play”. Un par de temas para tener en cuenta: estuvo bueno el hecho de que haya sillas en el entrepiso. Aquellos que sintieran que era hora de un pequeño descanso, podían recurrir a esa zona sin problemas. Eso también significa que el número de stands fue menor que en otros eventos, ya que generalmente ese pasillo en el entrepiso tiene algunos stands extra. El otro tema, bastante importante, es algo que venimos notando como una falencia en casi todos los eventos a los que venimos asistiendo (desde Anime Friends, pasando por Animega, Daicon y ahora, Anime Style): no hay suficientes tachos de basura. Nuevamente empezaron a acumularse los paquetes y los copones de ramen vaciós. Sabemos que había uno cerca de la cocina y otro al lado del lugar donde se compraba la comida, pero colocar estratégicamente otros 2 o 3 cestos colaboraría con la limpieza del lugar y, sobre todo, del lugar por el que todos tenemos que caminar: el piso.
Programa:
En buena parte, se cumplió. Sobre todo en lo que fueron las presentaciones de los grupos de Taiko, Para-Para y el Karaokè. Para los concursos de Cosplay, en ambos días, los cosplayers se nos confesaron confundidos porque recibieron una información, en principio, que luego no se reflejó al momento de dar el OK para que suban al escenario. Últimamente, estamos viendo que esta situación se repite al momento de los concursos de Cosplay: se hace difícil respetar el horario estipulado en el programa. Mientras más grande y más convocante es el evento, más gente se anota y más complicado se hace cumplir con el horario prometido. En el escenario que estaba ubicado cerca de las entradas hubo proyecciones de AMVs, videos de recitales de distintos cantantes, karaoke libre y se llevó a cabo la conferencia de la revista Komikku. Lamentablemente, poca gente se prestó a esta charla. Nosotros nos acercamos e hicimos un par de preguntas (punzantes, como para subir un poco la temperatura) y se armó una charla interesante en torno a lo que es la organización de eventos en el país y sobre esta especie de “kage bunshin” de eventos del que somos testigos mes a mes. Los invitamos a dejarnos sus opiniones al respecto en la sección de comentarios de este post.
Cosplay:
A pesar de ser un evento que podríamos catalogar como “semanal” (teniendo en cuenta que si vemos el calendario de eventos, vamos a razón de uno por semana), los concursos de Cosplay, separados en “Performance” (el sábado) y “Desfile”, con una mini-performance para el que quisiera (el domingo), estuvieron bastante cargados y el nivel fue de medio-alto para arriba. Los cosplayers nos siguen sorprendiendo. Si bien los premios en juego son cada vez un incentivo más importante, los cosplayers no pierden cada oportunidad de participar en un concurso con cosplays y performances cada vez más competitivos. La Anime Style no fue la excepción. Los fotógrafos se van con las memorias llenas de fotos de los estilos de Cosplay más variados. Cada evento ofrece la chance de enseñar un Cosplay nuevo, usar el que más te guste o estrenar una performance sorprendente. En este tipo de eventos, los cosplayers pueden darse ciertas libertades, soltarse un poco más y divertirse 100%, sin las presiones de un concurso de alto nivel competitivo. Aún así, qué sería del Cosplay sin el espíritu competitivo, ¿no?
Conclusión:
Un evento para pasar el día bien tranquilo. Una gama de actividades bastante interesante, un sector de juegos de gran nivel, gente cosplayeada por doquier y artículos para irnos felices a casa comprando esas pequeñas cosas que, para nosotros, son tan grandes. Un detalle a mejorar en la organización: más precisión y anticipación en la separación de colas por “compra de entradas en puerta” y “anticipadas”. Cuando entramos, se hizo muy sobre la marcha en vez de tenerlo planeado. Como dice el proverbio: organizador prevenido, vale por dos. Ustedes, ¿qué piensan? Pueden dejarnos sus impresiones, experiencias o un punto de vista en la sección comentarios. Hasta la próxima review. Mata! (“Nos vemos!”, en japonés).
